Para la realidad hace falta la ficción Hace unas semanas perdí el celular en la Universidad de Cuenca. Debió caerse en un sillón. Me levanté, regresé una hora más tarde y ya no estaba allí. Alguna persona debió de haberlo visto y lo sustrajo para su deleite personal. Tardé tres días en volver a comprar un celular nuevo (tan barato que nadie… Rubén Camacho Zumaquero